Barcelona
Que ver en Canovelles
Hemos dicho y comentado algunos de los mercados que hay en Barcelona, vertebradores de la interesante vida de barrio que poseen los distritos y barrios no oficiales de Barcelona. Pese a lo que se pueda suponer de una gran urbe como Barcelona, es increíble cómo los habitantes de la ciudad y de sus inmensos pueblos de los alrededores como Canovelles, poseen una bonita y cuidada tradición de mercados que ver. Y ejemplo de ello no sólo lo encontramos en la ciudad, sino que muchos municipios colindantes y catalanes también poseen esta misma costumbre.
Quizás el más conocido sea el mercado de Vic, pero no es el único, y es que el que tenemos hoy como objeto de este post, está a punto de cumplir los 50 años de existencia. Se trata del mercado de Canovelles, que nació en el 1961 con tan sólo 3 paradas.
El primer vendedor se llamaba Román da Silva Souto y vendía zapatos y se ubicada donde en su momento había un cruce y hoy día son las calles Riera, Prat y Diagonal.
Y no hizo poco este tal Román, y es que hoy día, cada domingo, visitan más de 10.000 personas el mercado de Canovelles. Se trata de un mercado de referencia para la comarca del Vallès Oriental y toda Catalunya en general, y consta aproximadamente de hasta 500 paradas distribuidas a lo largo de más de 3 km lineales de calle, ya que ocupa el entorno de las calles Riera, Sant Jordi, Diagonal, Unió, Sol, Sant Josep y Passeig de la Ribera.
Aproximadamente la mitad de las paradas son de téxtil y moda, seguidos por los de alimentación y quizás menos pero existentes, las paradas que poseen complementos de moda, salud y cosmética, equipamiento para la casa, el ocio y la cultura. Se trata de un espacio de relación entre los vecinos y convivencia, un mercado de calidad y que ofrece un servicio completo al consumidor. Si buscamos algo en concreto seguro que lo encontramos, y es que con 500 paradas no hay pieza de ropa ni fruta que no esté en este lugar.
En fin, seguramente uno de los pocos mercados masivos y tradicionales que existen aún en España y que posee ese ambiente de griterío y regateo que en muchos mercados se ha perdido. Todo un espectáculo que hace ver que no siempre los grandes centros comerciales son la única alternativa.
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